Cuanto tiempo sin escuchar el tañido de unas manos

Cuando tiempo sin sentir el tañido de unas manos
Un asirme la cabeza
El exigir a la locura de dos entidades
Escuchar palabras blancas es mi sexo
Sentir tu calida lengua acogiéndome mi grande
Con la fiereza acompasada de ritmos interminables
Acoger tu cuerpo penetrarlo
Escuchar las canciones de esa introducción
La saliva en mi cara
Con la locura de unos besos
Morderte el abdomen
Bajar a los lados de tu grande
Olerte saborearte
Así enredado en tu bello
Esa locura
Ese calor
Ese comerte rozar tu orificio
Mi pecho contra tu pecho
Pellizcarte tus pezones
Romperme
Al más dulce de los orgasmos
Cuanto tiempo sin escuchar el tañido de unas manos

Regálame un tú

Te velas entres las letras difusas de una Lucerna
Entras…
Escapas sin apenas aplaudir
Los códigos son tu defensa
Mientras muero por un beso en espera
Habitas en tus silencios desnudados
Congelando los privados
Dame algo un hola
Dame algo una sonrisa
Dame algo….
Lloro por saber
Rompiendo las palabras
No te escucho
Palidezco de ti por que sin ti estoy
Tan oscuros son los vómitos de lágrimas
Que matan la Sangre desolada de mis tinieblas
Regálame una brisa
Regálame una estela
Regálame un tú

Espectros

Los paramos cada día más difusos timbraban las Carnes
No se encontraban
Ni siquiera el cielo se unía con las rocas
Precipitaban... se entre tulipanes
El aire frío de los espectros

Somatizando los ritmos

Los silencios de los estados
Rugen las ventanas en tu vista
Salpican las tardes pétalos de negros rostros
En ese silencio tú
Acomodando los formatos de mi vida
Te adentras con el rallo
Tu planeta me muestra tus calmas
Fluyen los agridulces ríos
Se desencadenan los gritos
Todo… eres tú somatizando los ritmos

Para Vos

Camino... las distancias se me escapan entre la niebla
Se sacude el viento su elevada alma en mi espalda
Sueños de días conclusos sin ojos
A ti siempre en mí
A ti todo mi eterno vino de sangre
De mis rincones solo flores de luto
Para vos